La falta de acuerdos legislativos pone en riesgo la aprobación de presupuestos clave para las elecciones primarias y generales, generando incertidumbre sobre el futuro del proceso electoral

Tegucigalpa, Francisco Morazán .-. La parálisis en el Congreso Nacional, producto de la falta de acuerdos entre las distintas bancadas políticas, está generando serias preocupaciones sobre la estabilidad y continuidad de varios procesos clave en Honduras, entre ellos, los relacionados con las elecciones primarias y generales que se llevarán a cabo este año.
La situación de desacuerdo ha puesto en riesgo la aprobación de presupuestos cruciales para la operatividad de las instituciones encargadas de la organización y supervisión electoral, como el Consejo Nacional Electoral (CNE) y el Tribunal de Justicia Electoral (TJE). Sin la aprobación oportuna de estos presupuestos, los procesos electorales se verían gravemente afectados, según analistas políticos y expertos en la materia.
El exconsejero electoral Germán Lobo se mostró particularmente preocupado por el comportamiento del Congreso Nacional y sus consecuencias para el proceso electoral. En declaraciones recientes, Lobo indicó que la parálisis legislativa ha puesto en peligro la ampliación presupuestaria del CNE, así como la aprobación del presupuesto necesario para el Tribunal de Justicia Electoral, un órgano fundamental que tendrá un rol clave tras las elecciones primarias, especialmente en la resolución de disputas o impugnaciones por parte de los ciudadanos. «Algo que me preocupa es el comportamiento que está teniendo la clase política en el Congreso Nacional. No sé si esto limitaría tanto la aprobación de esos presupuestos», explicó Lobo, añadiendo que el CNE podría verse obligado a recurrir a alternativas para gestionar el presupuesto necesario si los bloqueos continúan.
Según Lobo, el CNE aún no ha podido enviar el proyecto de ampliación presupuestaria al Congreso debido a la parálisis que afecta a la institución legislativa. Este estancamiento ha generado una importante incertidumbre sobre la capacidad del país para cumplir con los plazos establecidos para las elecciones. Además, Luis León, otro analista político, destacó que la falta de consenso en el Congreso Nacional hace muy difícil que se logren aprobar los presupuestos necesarios tanto para las elecciones primarias como para las generales. León resaltó que esta situación pone en evidencia las dificultades estructurales que enfrenta el sistema político hondureño, que, lejos de priorizar los temas esenciales para el bienestar del país, sigue atrapado en disputas partidistas y en un clima de total parálisis.
En este contexto, la falta de sesiones y acuerdos en el Congreso se traduce en un retraso en la aprobación del Presupuesto General de la República, lo que impide que se asignen los recursos necesarios para el adecuado funcionamiento de las entidades responsables de la gestión electoral. La falta de esos recursos podría poner en peligro el desarrollo de todo el proceso, afectando la logística, el financiamiento de las actividades electorales y el buen funcionamiento de las instituciones encargadas de organizar y supervisar los comicios.
El panorama es cada vez más incierto, ya que la falta de progreso en las negociaciones políticas en el Congreso Nacional podría tener efectos directos sobre el desenvolvimiento de las elecciones primarias, que se celebrarán en pocos meses, y podría extenderse a las generales si no se resuelven los problemas financieros y logísticos a tiempo.