Rebaja en tarifas eléctricas beneficiará únicamente al gobierno, no a los consumidores
Las adendas a contratos energéticos prometían alivio en la factura eléctrica, pero el ahorro se destinará a las finanzas estatales.

Tegucigalpa, Honduras- La reciente aprobación de 18 adendas a contratos con generadores de energía en Honduras, que prometían una reducción del 4% en las tarifas eléctricas, no se reflejará en los recibos de los abonados de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEE). Según funcionarios del gobierno, el ahorro estimado de 1,800 millones de lempiras anuales se destinará exclusivamente a las arcas del Estado.
Las adendas, que comenzaron a negociarse desde el inicio del mandato de la presidenta Xiomara Castro, fueron aprobadas en bloque por el Congreso Nacional y publicadas en el diario oficial La Gaceta el 10 de marzo. Sin embargo, su entrada en vigor está prevista para el tercer trimestre del año, y los beneficios económicos se orientarán a fortalecer las finanzas públicas, no a reducir las tarifas para los consumidores.
El ministro de Energía y gerente interino de la ENEE, Erick Tejada, había afirmado que las renegociaciones representarían un ahorro total de 30 mil millones de lempiras a lo largo de la vigencia de los contratos, algunos de los cuales tienen plazos de 10 a 20 años. No obstante, este ahorro no se traducirá en una disminución inmediata de las tarifas eléctricas para los usuarios.
Antes de la aprobación de las adendas, se había prometido una rebaja del 4% en las tarifas eléctricas. Sin embargo, tras la aprobación, se aclaró que el costo de la energía sigue siendo elevado y que el ahorro generado será absorbido por el gobierno para cubrir déficits y fortalecer las finanzas estatales.
Además, se informó que las rebajas en la tarifa de Brassavola se reflejarán hasta que entre en funcionamiento el gas natural, lo que indica que los consumidores deberán esperar aún más para ver algún beneficio en sus facturas eléctricas.
La decisión ha generado críticas por parte de sectores técnicos y legisladores de oposición, quienes habían exigido que los contratos fueran revisados de manera individual y no en un solo paquete. Argumentan que la falta de transparencia y la centralización de los beneficios en el gobierno perjudican a los consumidores.
En resumen, aunque las adendas a los contratos energéticos representan un ahorro significativo para el Estado, los consumidores hondureños no verán reflejada esta reducción en sus facturas eléctricas en el corto plazo.