Washington fija postura sobre elecciones en Honduras y pone el foco en el cierre del conteo
Estados Unidos reconoce la participación ciudadana, rechaza acusaciones de injerencia y advierte que la decisión final debe reflejar el voto expresado en las urnas.
Tegucigalpa.– Con el proceso electoral hondureño aún sin una declaratoria oficial, Estados Unidos decidió marcar posición y dejar claro que el desenlace debe apegarse estrictamente a la voluntad expresada por los ciudadanos el pasado 30 de noviembre.
A través de un pronunciamiento público, la embajada estadounidense destacó que la jornada electoral se desarrolló de manera pacífica y sostuvo que el país necesita certeza, reglas claras y un cierre transparente del proceso. El mensaje subraya que corresponde exclusivamente al Consejo Nacional Electoral (CNE) concluir su labor sin presiones políticas ni interferencias externas.
La postura de Washington fue reforzada horas después ante la Organización de Estados Americanos (OEA), donde su representante, Michael Kozak, negó categóricamente que exista participación o manipulación estadounidense en los comicios hondureños, pese a los cuestionamientos surgidos tras expresiones públicas del presidente Donald Trump antes de la votación.
Según Kozak, una opinión política no equivale a injerencia y no limita la libertad del electorado. En ese sentido, recalcó que los hondureños votaron sin coacción y que cualquier intento de desconocer ese resultado representa una amenaza directa a la democracia.
Estados Unidos también advirtió que observará de cerca el desarrollo del escrutinio especial y condenó los llamados a la violencia o a la desestabilización en el período postelectoral. A juicio de Washington, el respeto a los resultados es clave para preservar la gobernabilidad y la confianza institucional.
Mientras tanto, el conteo oficial mantiene al candidato Nasry “Tito” Asfura en primer lugar con 1,305,033 votos (40.54 %), seguido por Salvador Nasralla con 1,261,849 votos (39.19 %), con el 99.80 % de las actas contabilizadas, a la espera de que el CNE destrabe el escrutinio especial.
