CNE refuerza seguridad ante licitación del TREP en medio de presiones institucionales
El organismo electoral blindó sus instalaciones para asegurar transparencia en la elección de la empresa que auditará el sistema de transmisión de resultados.

Tegucigalpa, Honduras- El Consejo Nacional Electoral (CNE) implementó estrictas medidas de seguridad en su sede principal como parte del proceso de licitación para la auditoría del sistema de Transmisión de Resultados Electorales Preliminares (TREP), una etapa clave en la ruta hacia las Elecciones Generales de 2025.
La decisión del CNE incluyó el blindaje físico del edificio y el reforzamiento de los controles de ingreso, con el objetivo de proteger documentación sensible y garantizar un entorno libre de interferencias que comprometan la integridad del proceso.
Esta fase es determinante, ya que se está evaluando qué empresa externa será la encargada de auditar la funcionalidad y confiabilidad del TREP, una herramienta que permite el conteo preliminar de votos y que ha sido foco de cuestionamientos en procesos anteriores.
Según autoridades del organismo electoral, las medidas se adoptaron en cumplimiento del calendario establecido y aprobado en consenso por los consejeros, con la intención de generar confianza en la ciudadanía y los actores políticos.
La acción del CNE ocurre horas después de que las Fuerzas Armadas de Honduras (FF. AA.) emitieran un comunicado donde indicaron que, a partir de ahora, todas las solicitudes del CNE deben ser dirigidas a la presidenta Xiomara Castro, como comandante general del ente castrense.
Las FF. AA. justificaron esta decisión con base en el artículo 277 de la Constitución de la República, alegando respeto a la cadena de mando institucional. No obstante, esta postura ha generado reacciones por parte de distintos sectores que advierten una posible politización del apoyo logístico militar.
A pesar de la nueva directriz, las Fuerzas Armadas reiteraron su compromiso de garantizar la seguridad en las instalaciones del CNE, incluyendo la actual fase de licitación, con el objetivo de que el proceso avance con normalidad y transparencia.
La vigilancia militar ya se encuentra activa en ambos locales del ente electoral, mientras la ciudadanía y la clase política observan de cerca los movimientos institucionales que marcarán el rumbo del proceso electoral de 2025.