Condenan a varios miembros de la MS-13 por narcotráfico, extorsión y porte ilegal de armas en Chamelecón
La Fiscalía Especial Contra el Crimen Organizado asegura penas de hasta 15 años para los involucrados en delitos que operaban en San Pedro Sula.

San Pedro Sula, Corté.– La Fiscalía Especial Contra el Crimen Organizado (FESCCO) de San Pedro Sula logró este 26 de noviembre varias sentencias condenatorias contra integrantes de la Mara Salvatrucha MS-13 que operaban en el barrio Chamelecón.
En audiencia de estricta conformidad, Roque Josué Sáenz Hernández fue sentenciado a 10 años de prisión: cuatro por tráfico ilícito de drogas y seis por asociación para delinquir. Por su parte, Marco Antonio Perdido Merino recibirá 14 años de cárcel, distribuidos en cuatro por tráfico de drogas, seis por asociación para delinquir y cuatro por porte ilegal de arma de fuego de uso permitido.
Ambos fueron capturados en la colonia Sabillón Cruz durante una operación conjunta con agentes de la Dirección Policial Anti Maras y Padillas Contra el Crimen Organizado (DIPAMPCO).
En el mismo proceso, Oscar Alexander Merlo Ríos fue condenado a 14 años de prisión y a pagar una multa de 10 mil lempiras por extorsión, más cuatro años adicionales por porte ilegal de arma de fuego.
Danys Antonio García recibió una pena de 12 años con nueve meses y deberá pagar 7,500 lempiras en multas por delitos de tráfico ilícito de drogas, porte ilegal de arma de fuego de uso permitido y porte ilegal de municiones de uso prohibido.
Eric Daniel Giménez Meza fue sentenciado a 13 años por tráfico ilícito de drogas, con multas adicionales, y a seis años más por asociación para delinquir, sumando un total de 23 años entre prisión y multas.
Finalmente, Maryuri Daniela Amaya Villafranca recibió una condena de 15 años por el delito de extorsión. Mientras tanto, los procesos de Ariel Briones García y Cristian Jonatan Mencía continúan pendientes por tráfico ilícito de drogas.
Estas condenas reflejan la coordinación de la FESCCO y las fuerzas policiales en el combate al crimen organizado en San Pedro Sula y buscan debilitar las estructuras de la MS-13 en la zona norte del país.






