Crecen las demandas de responsabilidades tras el caos electoral en las elecciones primarias de Honduras
El retraso en la distribución del material electoral y el lento escrutinio de votos generan acusaciones de fraude y presiones para que Rixi Moncada renuncie a su cargo en la Secretaría de Defensa.
Tegucigalpa, Honduras- A medida que pasan los días desde las elecciones primarias del domingo en Honduras, crece la indignación pública por los problemas logísticos y el lento proceso de escrutinio. Los ciudadanos exigen que se castiguen a los responsables del desorden, especialmente ante la demanda de que Rixi Moncada, actual presidenciable del partido en el poder, renuncie a su cargo como titular de la Secretaría de Defensa.
Uno de los principales puntos de controversia ha sido el retraso en la distribución del material electoral, particularmente en Tegucigalpa y San Pedro Sula, donde la carga electoral es más alta. A este problema se suman las demoras en el conteo de votos en los tres niveles electivos, lo que ha alimentado las acusaciones de fraude dentro de los principales partidos políticos del país.
El Fiscal General, Johel Zelaya, ha asegurado que no permitirá que estos incidentes queden impunes y que tomará las acciones necesarias contra los responsables. «No me temblará la mano», afirmó Zelaya, quien añadió que la Fiscalía ya ha tomado declaraciones de funcionarios del Consejo Nacional Electoral (CNE), las Fuerzas Armadas y los transportistas involucrados en el traslado del material.
Cuatro días después de las elecciones, el escrutinio de los votos sigue siendo extremadamente lento, con apenas un tercio de los resultados presidenciales disponibles. Esto ha generado frustración entre los ciudadanos, que esperan resultados claros y rápidos. A pesar de los dos cortes informativos del CNE la noche de la elección, el conteo de los votos avanza a un ritmo mucho más lento de lo esperado, lo que aumenta la desconfianza y la tensión en el país.
