Honduras Enfrenta Desafíos Económicos en un Año Electoral con Crecimiento Estancado y Alta Inflación
La economía hondureña se mantiene con un crecimiento cercano al 3.6 % y una caída en la inversión extranjera, mientras los hogares sufren los efectos de una inflación superior al 4.5 %, golpeando especialmente los precios de los alimentos.
Tegucigalpa, Honduras- Honduras entra en un año electoral con una situación económica compleja, marcada por un crecimiento estancado de aproximadamente el 3.6 % y una caída en la inversión extranjera directa. A pesar de estos desafíos, la inflación, que supera el 4.5 %, sigue siendo un golpe importante, especialmente para las familias que enfrentan precios elevados en alimentos básicos.
Según la Encuesta de Expectativas de Analistas Macroeconómicos (EEAM) del Banco Central de Honduras (BCH), el panorama económico para 2025 no presenta grandes variaciones, con una proyección de crecimiento similar al de los últimos años. Aunque se espera que el buen desempeño del café y el crecimiento de la economía estadounidense, principal socio comercial del país, brinden un respiro, la tasa de crecimiento sigue siendo insuficiente para resolver los problemas estructurales de Honduras.
A pesar de que el 3.6 % de crecimiento se ajusta al rango estimado por el Programa Monetario 2024-2025, los expertos económicos advierten que esta cifra no es suficiente para combatir la pobreza ni generar empleos de calidad. Cada año, más de 100,000 jóvenes ingresan al mercado laboral, y la tasa de crecimiento actual no ofrece las soluciones necesarias. Para lograr una reducción real de la pobreza y satisfacer las demandas laborales, los economistas sostienen que el país necesita crecer a un ritmo superior al 6 %, algo que parece distante bajo las condiciones actuales.
El estancamiento económico se ve reflejado en los sectores que actualmente impulsan el crecimiento, como las remesas enviadas por hondureños en el exterior, y actividades de energía, telecomunicaciones y sector financiero, que, aunque importantes, no son generadores masivos de empleo. Además, las remesas han mostrado un incremento en los primeros meses de 2025 debido a la incertidumbre generada por las políticas migratorias del presidente estadounidense Donald Trump, quien ha centrado su campaña en la deportación de indocumentados.
En cuanto a los sectores productivos, el buen desempeño del café, con precios superiores a los 350 dólares el quintal, ha dado algo de alivio a la economía nacional, aunque los beneficios aún son limitados frente a las necesidades estructurales del país.
En resumen, Honduras atraviesa un momento económico difícil, con un crecimiento que sigue sin perforar la barrera del 4 %, lo que complica los esfuerzos por reducir la pobreza y generar empleos de calidad. Con una inflación que sigue afectando a los hogares y una inversión extranjera que muestra signos de caída, el país enfrenta serios retos que requieren soluciones más allá de los márgenes de crecimiento actuales.
