Trump critica a tribunales por obstaculizar deportaciones de inmigrantes
El presidente estadounidense denuncia que las cortes bloquean sus esfuerzos para expulsar a extranjeros que considera peligrosos.

Washington, D.C. – El presidente Donald Trump ha expresado su frustración con el sistema judicial estadounidense, acusando a los tribunales de impedir la deportación de inmigrantes que él califica como criminales. Estas declaraciones surgen en medio de tensiones entre el Ejecutivo y el Poder Judicial sobre las políticas migratorias de su administración.
Durante una reciente conferencia de prensa, Trump manifestó que las decisiones judiciales están obstaculizando su capacidad para deportar a individuos que, según él, representan una amenaza para la seguridad nacional. «Los jueces están interfiriendo con nuestras acciones para proteger al país», afirmó.
Esta confrontación se intensificó tras la deportación de casi 300 venezolanos a El Salvador, una medida que fue criticada por diversos sectores y que llevó a cuestionamientos sobre la legalidad de las acciones del Ejecutivo. Trump defendió la decisión, argumentando que se trataba de una respuesta necesaria ante lo que describió como una «invasión de criminales».
La administración Trump ha utilizado leyes históricas, como la Ley de Enemigos Extranjeros de 1798, para justificar estas deportaciones, equiparando a ciertos grupos de inmigrantes con enemigos del Estado. Esta interpretación ha sido objeto de debate entre expertos legales y defensores de los derechos humanos.
Organizaciones de derechos civiles han expresado su preocupación por estas acciones, señalando que podrían violar principios constitucionales y tratados internacionales. Además, han instado a los tribunales a revisar y, en su caso, bloquear medidas que consideren contrarias a la ley.
En respuesta, Trump ha acusado a los jueces de extralimitarse en sus funciones y de poner en riesgo la seguridad del país al impedir la implementación de sus políticas migratorias. «No podemos permitir que decisiones judiciales debiliten nuestra soberanía», declaró.
Este conflicto entre el Ejecutivo y el Poder Judicial refleja las profundas divisiones en Estados Unidos respecto a la inmigración y el equilibrio de poderes. Mientras tanto, las comunidades de inmigrantes y sus defensores permanecen en alerta ante posibles cambios en las políticas migratorias.