Trump reconsidera aumento de aranceles al acero y aluminio canadienses tras acuerdo energético
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, revierte su decisión de duplicar los aranceles a las importaciones de acero y aluminio de Canadá después de que Ontario suspendiera el incremento en las tarifas de electricidad exportada a Estados Unidos.

El presidente Donald Trump había anunciado recientemente su intención de aumentar al 50% los aranceles sobre las importaciones de acero y aluminio provenientes de Canadá, en respuesta a la decisión de Ontario de incrementar las tarifas de electricidad exportada a Estados Unidos. Esta medida generó preocupación en ambos países debido al posible impacto en sus economías y en el empleo.
Sin embargo, tras negociaciones entre el gobernador de Ontario, Doug Ford, y el secretario de Comercio de Estados Unidos, Howard Lutnick, Ontario decidió suspender temporalmente el aumento en las tarifas eléctricas. Esta acción llevó a Trump a reconsiderar su posición y a cancelar el incremento de los aranceles al acero y aluminio canadienses.
La relación comercial entre Estados Unidos y Canadá es de suma importancia para ambos países. En 2024, las exportaciones canadienses de acero y aluminio a Estados Unidos representaron cifras significativas, subrayando la interdependencia económica existente. Un aumento en los aranceles podría haber afectado negativamente a diversas industrias y puestos de trabajo en ambos lados de la frontera.
La amenaza inicial de aumentar los aranceles generó nerviosismo en los mercados financieros, con caídas en índices como el S&P 500 y el Dow Jones. La posibilidad de una «Trumpcesión» preocupaba a inversores y analistas, quienes temían una desaceleración económica y un aumento en la inflación.
La decisión de Ontario de suspender el aumento en las tarifas eléctricas y la posterior cancelación de los aranceles adicionales por parte de Trump han sido recibidas con alivio por parte de la comunidad empresarial y los mercados financieros. Esta resolución muestra la importancia del diálogo y la cooperación en la resolución de disputas comerciales entre naciones interdependientes.
No obstante, este episodio resalta la volatilidad en las políticas comerciales actuales y la necesidad de establecer mecanismos más sólidos para evitar futuras confrontaciones. La estabilidad en las relaciones comerciales es esencial para el crecimiento económico y la confianza de los inversores en ambos países.
La capacidad de Estados Unidos y Canadá para resolver esta disputa a través de la negociación demuestra la fortaleza de su relación bilateral. Es fundamental que ambos países continúen trabajando juntos para mantener un entorno comercial estable y beneficioso para sus economías y ciudadanos.